A mediados de la década de los 30 del siglo pasado, las personas que escuchaban y tenían radio, eran privilegiadas porque se consideraba un lujo la tenencia de este tipo de aparatos, puesto que se debía pagar para escuchar un momento la difusión de algunos problemas y por su tenencia se debían depositar impuestos.
De esta manera, alumnos del tercer curso de la Carrera de Comunicación de la Universidad Técnica de Oruro expusieron algunos aspectos importantes relacionados con el quehacer de la radiodifusión en Oruro.
La iniciativa de tener una radiodifusora en Oruro, surgió de un grupo denominado de Defensa y Propaganda Nacional constituido en abril de 1933 con la presencia de representantes de varias instituciones como el Banco Central, la Cámara de Comercio, el prefecto y comandante del departamento, Abel Ascarrunz Peláez, delegado del Comité de Propaganda y Defensa Nacional, Néstor Lora, administrador del Banco Mercantil, Casa Simón I. Patiño y Casa Grace entre otros.
En esa reunión decidieron que todos los orureños hicieran un aporte en el que el más significativo fue del empresario minero Simón I. Patiño de 15.000 bolivianos; la Cámara de Comercio de 5.000 bolivianos; el Banco Mercantil 5 bolivianos; la Sociedad Estañífera Morococala, 1.500 bolivianos y otras donaciones con las que se llegaron a cubrir los gastos de compra de un equipo de radio.
Con el aporte de varias instituciones se lograron reunir 32.000 bolivianos para instalar el equipo de radio en el balcón de la Prefectura que estuvo a cargo de los técnicos de Radio Illimani.
Según versión de algunos personajes como el maestro Ricardo Cortez y Cortez en una entrevista que le hicieron en vida, manifestó que las primeras transmisiones tenían fallas técnicas y no eran muy nítidas.
Por su parte Harry Gamarra que es uno de los técnicos de radio más conocidos en Oruro, explicó que todos los programas se hacían en vivo, esencialmente los programas musicales para promocionar la música boliviana y existían algunos horarios específicos para conocer información de carácter económico, musical y de la Guerra del Chaco o política sobretodo.
En esa época José Álvarez decide alquilar su radio, es decir si alguna persona quería darse el lujo de escuchar un tema o alguna información debía pagar 10 centavos de ese entonces, porque no todos tenían el lujo de tener una radio en su casa.
En 1934 se emitió una normativa en la que se disponía que todos los que tenían radio en su domicilio debían pagar impuestos y su funcionamiento clandestino era sancionado además de la incautación del aparato de comunicación oral.
Las casas comerciales que vendían el artículo, debían dar parte de la venta y el nombre de quién compró el equipo para realizar un estricto control.
Asimismo, se conoció que existía Radio La Patria que fue inaugurada en 1935 a cargo del periodista Eduardo Ocampo Moscoso que fue el que impulsó la salida al aire de la emisora, el técnico que instaló la misma fue Manuel Sponda y al paso del tiempo tuvo gran apoyo del Periódico LA PATRIA que publicaba todo tipo de información sobre distintas áreas.
Mientras tanto Radio Bolívar que data de la misma época, era considerada como competencia de Radio La Patria como no tenía el apoyo de otro medio de comunicación fue decayendo puesto que su principal función era la de promocionar artistas y brindar información simplemente de su entorno.
De esta manera se pudo conocer diversos datos relacionados a la radio y se expuso los aparatos que datan del año 1934 los cuales aún funcionan, además de una explicación de lo concerniente a la radio difusión en Oruro, trabajo dirigido por el docente de la materia de investigación, Fabrizio Cazorla Murillo.
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