Pagina Siete
La nueva Ley de Telecomunicaciones, que está en tratamiento en la Cámara de Diputados, abre la puerta para la reversión de la mayoría de las frecuencias de radios y canales de televisión, pues el sector privado solamente tendrá un 33% del espectro electromagnético de un promedio de 90% con el que cuenta ahora.
¿Cómo garantizar el otro 33% que corresponde al Estado? Para la Asociación Boliviana de Radiodifusoras (Asbora), en el proceso de aprobación de esta ley y la migración al nuevo sistema no habrá modificaciones, pero la “gran preocupación” es a futuro, pues la mayoría de las licencias de frecuencias de las emisoras privadas fenece en el año 2017.
“La mayoría de las emisoras tenemos frecuencias habilitadas hasta 2017”, afirmó el presidente de Asbora, Raúl Novillo. “¿Qué va a pasar con las emisoras que hoy ocupan el 98% del espectro electromagnético y (cuando) solamente van a habilitar un 33%. Ahí hay un problema muy serio porque varias estaciones van a tener que cerrarse”.
Esto trae otro problema: “¿qué va a pasar con esos colegas que trabajan en radios?, se van a quedar sin trabajo, ¿qué va a pasar con los inversionistas de medios que quedarán sin sustento?”.
La preocupación de esta organización fue planteada a la comisión parlamentaria que revisó previamente el proyecto de ley elaborado por el Gobierno; sin embargo, no se tomaron en cuenta las objeciones, según Novillo.
La diputada del MAS y periodista Marianela Paco afirmó que “esas preocupaciones son válidas en tanto generen las condiciones de igualdad y oportunidades”, dos principios elementales del proyecto de Ley de Telecomunicaciones que puede ser aprobado hoy en detalle en la Cámara de Diputados.
La parlamentaria explicó: “Lo que queremos es hacer justicia con la comunicación generando una sociedad informada, una sociedad comunicada, (porque) la comunicación masiva como personal se ha elitizado”.
Citó como ejemplo la recuperación de ENTEL; a través de este servicio “se ha intentado universalizar de forma masiva la comunicación celular, (pero) el resto de los medios como radio y televisión siempre tienen espacios que no cubren, o se cubre con deficiencias de calidad de audio o señal y no es universal”.
“Por ejemplo, ATB o canal 7 no llegan a todas las comunidades de Bolivia, esa democratización no ha llegado a nuestro país y por eso se permite al Estado que desde las gobernaciones, municipios y universidades puedan tener medios que hagan que lleguen con la información. Seamos pues una sociedad comunicada en todos los rincones. Si revisamos internet, sólo el 10% tiene acceso a este servicio y ni siquiera hace un uso permanente; existe discriminación”, indicó.
La diputada Paco dice que el primer objetivo, con la nueva ley, es garantizar la igualdad de derechos de los ciudadanos bolivianos, luego se verá cómo se logra construir el Plan Nacional de Administración de Frecuencias, que definirá específicamente cómo se garantizará las cuotas que corresponde a cada sector y no solamente en cuanto a radio y televisión, sino los servicios de internet y celular.
Página Siete intentó hablar de este tema con el viceministro de Telecomunicaciones, pero se indicó que la autoridad no se referirá al proyecto y que las preguntas se dirijan al diputado Marcelo Elío; no obstante, el legislador no contestó a los requerimientos de este matutino porque se encontraba en una reunión de bancada.
Los cálculos de la aplicación de la norma
Frecuencias Según estimaciones de Asbora, actualmente hay más de 680 radioemisoras que están funcionando legalmente en los nueve departamentos del país. Reducir esta cantidad a un 33% implicará que en las capitales de departamento funcionarán pocas emisoras privadas, sin contar los canales de televisión.
2017 Éste es el año promedio en el que la mayoría de las licencias de las radioemisoras vencerá, por lo que Asbora teme que éstas no serán renovadas y las emisoras tendrán que cerrar, despedir a sus trabajadores y los empresarios pueden perder sus inversiones. El sector privado tiene derecho a tener un 33% de frecuencias.
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