¿Cuál es tu impresión del sacrificio que hizo Angelina Jolie para prevenir el cáncer?
Es una mujer inteligente. Siempre me dio la impresión de humana, sensible y, ahora, con la noticia de hacerse una cirugía de este tipo, demuestra valentía, amor por la vida y por sus hijos. ¡Dios la mantenga sana!
¿Cuál ha sido el sacrificio en tu caso?
La enfermedad es una cruz, porque todos los días tengo presente el cáncer de mama. Cuando me lo detectaron pasé los peores momentos, pero lo más difícil que enfrenté fue dejar a mi bebé para ir a Buenos Aires por cuatro meses a realizarme todos los tratamientos y las cirugías.
¿Cómo te sentís en este momento?
En noviembre dejé de tomar la medicación que había usado por dos años y medio. Lo hice porque quiero quedar embarazada. Consulté con mi mastólogo, que me dio su visto bueno, mi ginecólogo me dio un no rotundo, pero como me conoce me dijo que lo único que podía hacer era prepararme. Ahora solo espero que se normalice mi sistema hormonal; sin embargo, le está costando a mi cuerpo volver a funcionar. Mi ovario está inactivo y yo lo dejo en manos de Dios. Pienso que si este año no se normaliza, me saco la matriz y el ovario que me queda para
eliminar las probabilidades de volver a sufrir de cáncer.
¿Has pensado en una mastectomía?
Lo hemos conversado con mis doctores y no tendría problema en hacérmela. Me gustaría realizarme una más completa que la de Angelina Jolie para reducir cualquier riesgo, porque la operación que ella se hizo, que le deja la aréola y el pezón, mantiene el 5% de riesgo. Es un acto heroico.
Pero, ¿tus ganas de tener otro hijo siguen firmes?
Por supuesto. Yo ya tengo la bendición de ser mamá, pero lo que quiero es darle a mi hija una familia, porque papá y mamá mueren y quienes quedan son los hermanos.
¿De qué manera cambió tu vida la maternidad?
Creo que a todas las mujeres las cambia. Te das cuenta de cuán valiosa puede ser tu vida para esa personita. Lo único que querés es salud para tus hijos. Cuando me toca pedir un deseo, lo primero que pido es salud para Bruna. Yo no quiero que ella pase por lo mismo que yo. Sé que es una firme candidata para tener cáncer porque su madre se lo ha transmitido. Yo le he dado eso a mi hija, son pensamientos que se me vienen. Uno da la vida por sus hijos y también lucha por su propia vida por ellos.
¿Cómo encarás tu salud desde que enfermaste?
Antes, cuando modelaba, siempre me preocupé de mi físico, ahora mi prioridad son mi hija, mi esposo, mi familia, mi trabajo y lo físico pasó a un quinto plano, pero hoy en día me alimento bien. Una de las causas de mi cáncer tiene que ver con que en algún momento, por mis dietas estrictas, descuidé mi sistema inmunológico y me enfermé muy fuerte. Ahora me cuido, evito la comida chatarra, esto es algo que le recomiendo a todos. No se olviden que la voz convence, pero el ejemplo arrastra. Tengo el privilegio de ser imagen de varias campañas contra el cáncer y ahora la gente está tomando más conciencia por estas cruzadas.
Sos una figura, tenés tu propia familia. ¿Saldrás de la casa de tus papás?
(Risas) No he soltado todavía mi cordón umbilical. Sigo viviendo en la casa de mis padres desde hace 37 años. Tengo un departamento para trasladarme, pero me cuesta salir del barrio donde he crecido y está toda mi vida. A mi papá es al que menos le gusta la idea, peor con su nieta que es la alegría de la casa. Mi madre me dice: “Yo la amo, pero quiero que aprenda el oficio de una ama de casa” y tiene razón. Pedro me dice: “Tus padres son buenos, pero necesitamos formar nuestro propio hogar”.
Se comenta que estás separada de tu marido o con problemas de matrimonio. ¿Es cierto?
Imposible. Este amor viene desde vidas atrás. Cuando llegó Pedro a mi vida, sé que lo hizo para quedarse. Me casé a los 33 años, antes de eso sufrí, lloré por amor y desamor. Tenemos peleas como cualquier matrimonio, pero hay mucha confianza. Puedo contarle todo y no recibo censuras, mi marido me gusta porque yo puedo ser con él, somos cómplices y es excelente papá. Hay mucho amor. Sin él a mi lado, mi forma de afrontar la enfermedad hubiera sido diferente. A veces estoy mal, me pongo a llorar y él me calma con su frase: “Todo va a estar bien”. Es mi aliento
PROTAGONISTA
Ocupación: presentadora del
Programa todo bien, de la red ATB
Edad: 37 años esposo: Pedro Gantier
Hija: Bruna tratamientos POR EL CÁNCER
Carla fue sometida a fisioterapias, radioterapias y quimioterapiasretoques estéticos
“Me hice algunos detalles en los labios y me arrepiento en el alma, porque me quedaron unas bolitas. Eso fue un día antes de mi viaje a Punta del Este para el desfile de Roberto Giordano”.
sobre la nueva ola de modelos
“Hay más exigencias porque no solo se basan en tener a una mujer con la piel y el pelo bien cuidados, les exigen que tengan la capacidad de desenvolverse más”.
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