Dos niveles del Shopping Norte se llenaron con niños y adultos caracterizados como los personajes que creó Chespirito. Todos respondiendo a la convocatoria de Bolivisión para homenajear al papá del Chavo.
La Paz y Santa Cruz vivieron una jornada llena de Chavos, Chilindrinas, Popis, Ñoños y demás personajes. Los niños, acompañados de sus madres, se alistaban en los pasillos de las instalaciones de Bolivisión ayer.
“A mí me gusta el Chavo porque vive en una vecindad y es divertido”, contaba Karen Callisaya, de 14 años, que iba vestida de Popis. Su hermano José, de 11, era un Chavo entusiasmado que ya quería hacer su show.
Los participantes contaron con tres minutos para mostrar sus destrezas. Tres categorías fueron tomadas en cuenta: los conocimientos de los personajes y programas, el performance individual y el grupal. Vecindades enteras se presentaron. El ballet Free Dance se caracterizó y contaba con máscaras de látex con las caras de los personajes del Chavo del Ocho.
Otros postulantes, como Giovana Arce, que era doña Florinda, y Elizabeth Quiroga, la Chilindrina, practicaban su actuación. Ellas son mamás de alumnos del colegio Instituto Americano. “Somos admiradoras totales. Vinimos temprano y estamos muy emocionadas. Los otros personajes están a punto de llegar porque están pidiendo permiso de la oficina”, contaba Quiroga. En ese momento llegó José Bustillo, como el señor Barriga. “Tenemos como 50 años y hemos crecido con Chespirito... ¡cómo no hacer esto!”, exclamaba.
Todos se contagiaron de la fiebre de Chespirito llenando formularios y haciendo fila. Algunas madres ya cansadas, como Marcela Quisbert, decía “no sé todavía a qué hora entremos, pero yo veía el Chavo y traje a mi hijo porque él lo ve”.
“Creo que el casting se extenderá hasta mañana”, manifestó Vladimir Uzeda, primer asistente de producción de Bolivisión. Así, todo el día se escucharon los ‘eso, eso’, ‘ta, ta, ta’, ‘pa’ que te digo que no sí, sí’ y ‘¡chusma, chusma!’.
No hay comentarios:
Publicar un comentario