Soy Carlos Villalobos Valdivia. Nací en Santa Rosa de Yacuma, Beni, el 12 de febrero de 1984. Estudié comunicación. Soy soltero e hincha del Tigre. Actualmente soy co-conductor del programa Zona Pública (que se difunde por Cadena “A”) y tengo una empresa, Comunicación de Audiovisión Virtual, que maneja la imagen corporativa de varias empresas.
LG:¿Cuál es tu mayor tesoro?
C: Mi madre y mi hijo, ellos representan lo más importante en mi vida. Mi madre es mi pilar y mi hijo es la persona por la que quiero salir adelante.
LG: Si volvieras a nacer, ¿qué cambiarías de tu vida?
C: Mmm, creo que nada, cuando era chiquillo quería cambiar muchas cosas, pues vengo de una cuna muy humilde y sencilla y quería tener muchas cosas que mis otros compañeros tenían, pero ahora me doy cuenta que haber nacido donde nací, con todas las dificultades que tuvimos, me ha hecho crecer.
LG: Físicamente, ¿cambiarías algo?
C: Tampoco, tengo la nariz y los dientes desviados, cuando estaba en colegio era bárbaro y, bueno, creo que me acostumbré a eso, no me considero un adonis, es más, considero que si estoy trabajando en la televisión no es por la belleza, (sino) simplemente es por el esfuerzo.
LG: ¿Cuál es tu mayor fortaleza?
C: Mi carácter, no me dejo vencer así nomás. He aprendido a combatir, es muy importante fortalecer tu espíritu.
LG: ¿Cuál es tu mayor debilidad?
C: En un momento de mi vida he sido bastante inestable, indeciso y no tenía confianza en mí mismo.
LG: ¿Qué es lo mejor que han dicho de ti?
C: De gente ajena no sé (sonríe), pero para mi madre, mi hermano, mi hijo y mis sobrino soy algo de lo mejor que ellos tienen.
LG: ¿Y qué lo peor?
C: Uf… de todo… si te dijera, no estaría en esta entrevista (sonríe).
LG: ¿Tienes alguna manía antes de o para dormir?
C: Nada en especial, soy una persona no predecible en ese sentido, a veces no me llega el sueño o me llega de golpe y a veces me voy a la cama sin lavarme los dientes y perdón que lo diga, y otras me pongo cremita o cosas así, hay días en los que me da hambre y como, soy de buen diente (sonríe).
LG: ¿Cómo te gusta dormir, abrigado o liviano?
C: Creo que la edad me está haciendo cambiar bastante, antes sólo dormía con bóxer y polera y con un cobertor y sábana, ahora estoy comprando más cobertores y colchitas, ya duermo más abrigadito. Hace meses mi hermano me regaló un pijama del Tigre en mi cumpleaños y duermo con eso.
LG: ¿En qué piensas cuando despiertas?
C: En que tengo que luchar, no me puedo dar el lujo de detenerme porque a diferencia de otras personas que han tenido bastantes oportunidades, yo no puedo, porque un día que descanse, tal vez al otro día no tenga para comer o pagar mi alquiler.
LG: ¿Eres parte de las redes sociales?
C: Muy poco, soy bastante hermético en ese sentido. Las redes las utilizo para hacer negocios y conversar con personas que están muy lejos y a veces me alegro porque me posteen en alguna foto, ¿no?, yo no soy de fotos.
LG: ¿Cómo te desenchufas de tu rutina?
C: Me encanta ver películas en casa, mi cuarto es mi refugio, trato de que sea lo más bonito posible.
LG: ¿Qué cosa nunca perdonarías?
C: Antes tenía cosas que no podía perdonar, entre ellas la traición. Hoy entiendo que todos cometemos errores y como se dice: “El que esté libre de culpa, que tire la primera piedra”. Creo que estoy capacitado para perdonar muchas cosas, al menos me trato de esforzar en eso, no soy una persona que tenga la moral para estar juzgando todo, he cometido un montón de errores en mi vida.
LG:¿Cuál ha sido el día más triste de tu vida?
C: Cuando me separo de mi hijo y perder ese concepto de familia, yo vengo de una madre que fue también padre, entonces siempre decía cuando era niño que no voy a permitir que mi hijo no tenga papá y ese día fue mi peor momento porque me sentí fracasado conmigo mismo.
LG: ¿Qué haces cuando reniegas?
C: Grito, exploto, tengo un carácter que no es de los mejores.
LG: ¿Cuáles son los defectos que te molestan de los demás?
C: La mentira, me gusta que las personas aunque me hieran me digan la verdad, prefiero que me digan mis defectos a que me adulen.
LG: ¿Aventurero o conservador?
C: Soy una fusión de ambos, aunque hay cosas que me gustaría experimentar, como ser piloto, como John Arandia, y me encantaría hasta ser ninja (sonríe).
LG: ¿Cuál es el mejor consejo que recibiste?
C: El de no juzgar a mis semejantes, en esta vida el que no cae resbala.
LG: ¿Qué poderes mágicos te gustaría tener?
C: Sanar a la gente, creo que las personas hoy podrían tener todo si tuvieran salud, la salud es muy importante.
LG: ¿Cómo te gustaría que te recuerden?
C: Creo que no me gustaría que me recuerden, soy una persona muy fanática de la producción, entonces me encanta producir y que otras personas se vean reflejadas en mi trabajo, es decir, me encantaría más bien construir a alguien a quien recuerden bastante.
LG: Si tendrías que ser otro presentador ¿quién serías?
C: Admiro a muchas personas, desde Martín Sotomayor, que me ha dado la oportunidad de hacerme conocer a nivel nacional, pasando por Pablo Llano, Javier Encinas y Rodrigo Zelaya. Dentro del campo del espectáculo son los exponentes más importantes que tiene el país y yo crecí con ellos.
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