Ayer volvió a transmitir en vivo para reafirmar su compromiso “de por vida” contra estos programas bajo el lema “Construir no destruir”. Incluso ya tiene una polera con ese logo.
El autor de “La bomba” cuestionó a quienes producen estos programas, autorizan que se emitan y los financiadores. También pidió a las autoridades de Migración, Impuestos Internos, Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen e Interpol que hagan un control constante y verificación de estos programas.
“Violar nuestros derechos constitucionales, a la privacidad, intimidad, honra, honor, propia imagen, dignidad y mucho más se ha convertido en un negocio tan vil como el de las drogas”, escribió.
El lunes, Zambrana denunció que fue amenazado de muerte y que es perseguido por más de un año por diferentes programas.
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