El poder gasta dinero en comprar voluntades de periodistas, que dejan de ser entonces periodistas para convertirse en propagandistas del poder que les ha comprado, afirma el periodista y filósofo argentino Miguel Wiñaski.
El hecho es calificado por el profesional como una situación muy lamentable, pero que existe un antídoto efectivísimo frente a este ataque del poder. El contraveneno es la fortaleza de la formación profesional de los periodistas.
Wiñaski en diálogo con Opinión se refirió a este y otros temas.
El director de la Maestría en Periodismo de El Clarín, considera que si una persona es periodista, lo es porque lo que ha practicado y estudiado y, en esas condiciones, le será difícil convertirse en propagandista a pago.
De manera serena y pausada, Wiñaski compara: es como imaginar que un médico deja de serlo y se convierte en curandero comerciante de mercancía barata y vende pócimas que enferman.
Consultado sobre si el periodismo es un oficio o una profesión y que en Cochabamba el Colegio de Comunicadores pidió a las instituciones y medios que contraten a periodistas con título,Wiñaski responde que hay muchísimos buenos periodistas que no tienen formación académica.
Aclara que el requisito es tener formación de periodista pero que eso no eso necesariamente significa que sea académico. Los periodistas se pueden formar de mil maneras; con talleres, seminarios cursos de varias disciplinarias. Observa además que las universidades, en la mayoría de los casos, no enseñan periodismo. “Es como asistir a clases de medicina con teóricos de la salud en ausencia de cirujanos, médicos clínicos y anestesistas. En las universidades debe haber una racional dosificacion de la teoría y la práctica aplicada al periodismo.
El experto académico de la Universidad de San Andrés de Argentina va más allá al decir que exigir una matriculación universitaria para continuar en un medio, puede restringir la libertad de prensa que es universal. “Lo digo desde adentro (de las universidades) y no desde afuera”, agrega.
Aclara que, pese a todas las observaciones, el ingreso a las redacciones cada vez se da a través de la búsqueda de interesados en las escuelas de periodismo en las universidades.
INVESTIGACIÓN En los países latinoamericanos, grandes grupos económicos generan muros que impiden la transparencia, y que los medios necesitan tiempo, inversión y capacitación para hacer periodismo de investigación. “Sólo los medios más sólidos económicamente invierten en equipos de investigacion”. Frente a ésto, se opta por sitios online (blogs, twitter y redes) administrados por pequeños grupos en países latinoamericanos con el mérito de haber descubierto cuestiones oscuras con efectos políticos muy interesantes.
“En general en Latinoamérica ninguno de los grandes hechos de corrupción ha brotado desde los poderes del Estado, ni siquiera de la clase política, sino a partir de los medios periodísticos y esto es un rol central.
Sin periodistas capacitados y sin investigaciones de envergadura la corrupción sería mayor, por eso el periodismo de investigación es vital.
Recuerda que como periodista él tuvo nueve juicios penales durante el gobierno de Saúl Menem en Argentina. Hoy, con el gobierno de Cristina Kirtcher los periodistas reciben la hostilidad a partir de un gran aparato de propaganda costosa que pagan los ciudadanos argentinos.
No es tan fácil bloquear la información, de hecho, es imposible. La censura ha muerto, sólo algunos no lo han advertido, “si te bloquean hay otras formas de seguir el periodismo. “La voluntad antiperiodística que es muy dañina está destinada al fracaso”, concluye.
La primicia ha muerto, ahora vive el detalle
La primicia ha muerto. La contundencia de la frase deja un silencio sepulcral en la clase.
Miguel Wiñaski es claro y sin rodeos parece estar leyendo el epitafio de la tumba de la noticia publicada por primera vez.
El deceso de la primicia permite ahora buscar el plus de la noticia, llegar all detalle que nadie vé, a la historia detrás de cada hecho. Noticia ahora es aquello de lo que la gente habla y hay que prestarle atención. Algunos periodistas cierran la historia en algún hecho, para otros un hecho es la apertura de otra historia.
El taller está destinado a mejorar la forma de acercar el periodismo a la población y considera que lo mejor que puede hacer para sobrevivir es capacitarse ya que el soporte de la noticia es ahora secundario. Hoy interesa la calidad narrativa, fotográfica, el dato de la información, la originalidad infográfica en los distintos soportes y la profundidad de las investigaciones de manera que esta revolución requiere del uso de nuevas tecnologías, pero esencialmente de obtener historias de vida para captar audiencias mayores.
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