China suspende una cadena de televisión por emitir un programa "grosero"

Las autoridades chinas han suspendido una cadena de televisión con fines educativos de la provincia oriental de Jiangsu por emitir un programa que consideran "grosero", informó hoy la Administración Estatal de Radio y Televisión (SARFT).

A través de un comunicado, el organismo aseguró que la cadena "Jiangsu Education TV Station" ha violado "las regulaciones gubernamentales" y ha sido retirada de la parrilla televisiva por emitir un programa soez.

La cadena ha sido considerada responsable de la emisión de un programa de entrevistas llamado "Bang Bang Bang" en el que, dice el texto, "no cesaron de sucederse los insultos gratuitos".

El vídeo del programa, que se emitió el pasado día 24, reproduce cómo tres invitados y algunos miembros del público del plató se enzarzan en "feas discusiones que tienen una pésima influencia para la audiencia", reza la circular.

Además, el organismo regulador televisivo subraya que la cadena de Jiangsu se excedió de su supuesto corte instructivo y comenzó a producir programas "más allá de asuntos educativos", en contra de la regulación vigente.

La SARFT ha dado órdenes a las cadenas del país chino para que promuevan contenidos "positivos" en sus producciones, a la vez que se queja de que hay demasiados programas de entretenimiento en las cadenas locales.

Ésta no es la primera vez en menos de un año que salta la polémica en la parrilla televisiva del gigante asiático.

Hace unos meses, las autoridades obligaron a modificar el formato, al considerar que el original ofrecía "excesivo entretenimiento", del popular programa "Feichang Wurao", conocido en Occidente como "If You Are The One" ("Si Tú Eres el Elegido") y centrado en la búsqueda de parejas para solteros.

Anteriormente, las autoridades también censuraron la controvertida -y exitosa- producción "Entrevistas antes de la ejecución" tras cinco años en antena.

El programa, muy criticado en el exterior, llevaba a los hogares chinos las últimas declaraciones de los reos antes de ir al patíbulo y tenía una audiencia de unos 40 millones de espectadores.