— ¿Cuál fue el objetivo para el nacimiento de La inaudita?
— Era el de poder compartir y hacer conocer la música de tradición escrita contemporánea. Generar un espacio crítico respecto al mismo. No sé si es por el programa o es cosa fortuita pero he visto más presencia de gente joven en los conciertos, que no son necesariamente estudiantes de música. Ese fue otro de los intereses desde el nacimiento (acercar a la gente).
— ¿Intenta crear un espacio de crítica y análisis dentro del programa con respecto al contexto de la música que presenta?
— Lo que es música y política veo que está relegado dentro de los espacios artísticos y centros de formación. Se puede hablar de cierto compositor y su obra, en algunos casos, porque tampoco se estudia mucho todas sus facetas políticas, humanas o sociales. Se toma en cuenta la música como elemento suelto, independiente, como si no tuviera nada que ver con la vida del autor. Me interesa atar esos cabos y relacionar esas cosas en el programa La inaudita.
— ¿Para qué público se encuentra elaborado el programa?
— Para cualquier persona. Se tiende a pensar que la música contemporánea es un espacio elitista y exclusivo solo para algunos superdotados. Me interesa bajar a la música de tradición escrita, en general del altar y ponerla al acceso de los que no necesariamente han estudiado música para que puedan conocerla y disfrutarla. También me gustaría que los académicos y estudiantes la escuchen, porque es un poco para sacudirlos, para que ubiquen que no hay una verdad absoluta.
— ¿Su formación académica le permite tener una sensibilidad diferente con relación al material que presenta en su programa?
— Mi acceso al material ha sido a través de mis estudios en Uruguay, mis maestros tenían un archivo enorme, mucho material y me traje un montón. Hay muchas cosas que son difíciles de conseguir aquí. Uso mi propia discografía. Ahora, esto lo he podido conocer a través de mi estudio y así también he empezado la búsqueda en la red de internet.
— ¿Por qué en radio Deseo?
— Porque hay una afinidad ideológica con la radio y con Mujeres Creando. La María (Galindo) es una amiga personal con la que hemos hecho cosas juntas y compartimos mucho a nivel ideológico. Nunca consideré hacerlo en otra emisora. Ella ha entendido perfectamente lo que yo quería y me ha abierto las puertas y me ha hecho comentarios bien interesantes sobre los programas que hice y, además, me escucha siempre. Los músicos a veces no entienden lo que yo quiero decir en el programa que ofrezco; sin embargo, la María sí.
— ¿Tiene réditos económicos o solo lo hace porque es su pasión?
— No recibo un sueldo, aunque en la radio hay la libertad para los que somos productores independientes, de conseguirnos auspiciadores. Esto no me preocupa. Mis ingresos vienen sobre todo de dar clases o componer. En la actualidad estoy trabajando haciendo música con un estudio de animación.
— ¿En qué proyectos se encuentra?
— Estoy haciendo otro ciclo de música en vivo que se denomina La inaudita móvil. El programa se graba donde haya concierto de música contemporánea. Para llevarla a la casa de la gente que no pueda asistir; o de repente puedo jalar a nuevo público a ir a presentaciones.
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