"Hacemos el pago bajo protesta porque se trata de una multa injusta, completamente ilegal", dijo el vicepresidente de la televisora, Carlos Zuloaga. Su padre, Guillermo, se encuentra exiliado en Estados Unidos, desde hace tres años.
Aunque Globovisión tenía aún pendientes recursos judiciales sin resolverse, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) dispuso el jueves pasado el embargo sobre sus bienes por un valor de 5,6 millones de dólares, lo que implicaba técnicamente el cierre de la televisora.
Chávez cerró hace cinco años Radio Caracas Televisión (RCTV), el canal más importante de Venezuela, con un 53 por ciento de teleaudiencia, al no renovarle la licencia de funcionamiento. RCTV denunciaba todos los atropellos del régimen.
En junio del 2011 se produjo un sangriento motín en una cárcel cercana a Caracas y la cobertura de Globovisión fue considerada por el gobierno como "incitación al desconocimiento del orden jurídico" al causar "zozobra en la ciudadanía".
Con vídeos en los que los propios funcionarios del gobierno declaraban la gravedad de la situación, Globovisión destruyó los argumentos del régimen, pero aún así le fue aplicada en octubre la multa que no tiene precedentes en Venezuela.
El objetivo, a todas luces, era cerrar la televisora como le ocurrió a RCTV o las 34 emisoras de la cadena Global.
Globovisión abiertamente se ha puesto al lado del candidato opositor Henrique Capriles para los comicios del 7 de octubre. La campaña oficialmente empezará el domingo.
Capriles ha realizado ya algunas multitudinarias concentraciones en las principales ciudades del país y el único canal que las transmitió fue Globovisión. Otros canales independientes se autocensuran.
La televisora, al pagar la multa que considera completamente injusta, evitó el multimillonario embargo que implicaba su cierre. Centenares de venezolanos acompañaron hoy a los directivos del canal a depositar la multa en el TSJ.
ANF
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