Días especialmente intensos vivieron alrededor de 70 periodistas, técnicos y funcionarios. El parto de una criatura mediática sin precedentes en el departamento y, en buena medida, en el país quedó grabado en la memoria colectiva íntima.
Se rompió el molde arcaico del periodismo de papel, del ya nostálgico y caduco periodismo pueblerino. Se rompió el molde forzado de periodismo dependiente de cadenas nacionales orientado, casi conmiserativa y despectivamente, a las “regiones”.
Por lo tanto, se inició una apuesta comunicacional decidida a apuntalar el desarrollo integral de Tarija y de Bolivia. Para ello, esos aproximadamente 70 corazones, esas 70 voluntades, durante meses, cambiaron su rutina por hasta triples jornadas de aprendizaje, trabajo y construcción, respectivamente. Ahora es un orgullo decir que El País eN está en las calles de toda Bolivia.
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