Imagínese: una radio que camina, hace comunicación andante, con raíces en los pueblos originarios del Norte Potosí, bautizada en los evangelios del minero boliviano y experimentada en trabajos comunales de vecinas y vecinos de barrios populares. Activista a morir, metida en los socavones, en las movilizaciones populares, presente en la siembra y en la cosecha. Esta es la radio Pío XII, la casa del pueblo.
Nació en la cuna de sindicatos mineros y ayllus. "La Pío” nació el 1 de mayo de 1959, en Siglo XX, a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar, en la cuna del sindicalismo y del comunismo boliviano y de los ayllus aymaras de Bolivia, cuando EUUU y las Repúblicas Socialistas Soviéticas estaban en gran confrontación.
La Iglesia Católica era gobernada por Juan XXIII y se fundía la teología de la liberación en puertas del Concilio Vaticano con la opción preferencial por los pobres.
Sus padres, los misioneros católicos Oblatos de María Inmaculada del Canadá, Estados Unidos, España y otras regiones del mundo, tenían la misión imposible de luchar contra el alcohol y contra el analfabetismo.
Fundaron la radio con el rostro minero y el del campesino-indígena. Coco Manto uno de sus locutores dijo: "La Pío” nació con el evangelio en la mano, pero desde la vida cotidiana de mineros e indígenas.
Con su potencia llegó a los habitantes de los rincones más olvidados del Norte Potosí.
Se levanta a las 4:30. Enciende 10 kilovats de onda corta y 10 kilovats de onda media. Empieza su jornada junto a mineros y campesinos.
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